Scott Pilgrim, if your life had a face, I would punch it.

Hoy por fin pude ver 'Scott Pilgrim contra el mundo' y tal vez me estoy dejando llevar por la emoción, que es lo que normalmente sucede en los momentos posteriores a ver una película que me completa, pero para mí ha sido todo un deleite el visionado. Por lo tanto ten en cuenta estas razones para darle una oportunidad en tu siguiente noche de pelas.

Primero, tomar como base la novela gráfica de Bryan Lee O´Malley, y si no sabes de que te hablo, acá tienes una pequeña sinopsis. La película nos cuenta la historia de Scott Pilgrim, un chico bastante raro que se encuentra en una curiosa situación. Para formalizar su relación con una chica nueva en el barrio, Ramona Flowers, deberá antes enfrentarse y vencer a sus siete ex novios que han formado una Alianza mortal que controla el futuro amoroso de Ramona. Además deberá cortar con su novia actual, una oriental de 16 años que adora con toda su alma a Pilgrim y la banda de música, llamada Sex Bob-Omb, en la que él toca el bajo.

Segundo, un argumento que es una locura total adaptada perfectamente a los formatos de hoy. Para mi, la primera película que mezcla con éxito los mundos del videojuego y el cine, que muy pocas veces se entienden. En suma una película inteligente, y sobre todo con mucho sentido del humor.


Tercero, un casting perfecto, con un inexpresivo Michael Cera, que año tras año parece interpretar el mismo personaje. Una sosa, pero bella Mary Elizabeth Winstead y un espléndido Kieran Culkin, como el amigo gay ideal.


Y cuarto y último, la música que es la parte fundamental en la historia del comic (cuyos cinco primeros volúmenes leí la semana pasada), y que acá también tiene un fuerte protagonismo, lo que queda reflejado en un soundtrack de 22 temas, que reúnen a artistas de diversas corrientes como Beck, Frank Black y Metric, y otras bandas no tan conocidas como Beachwood Sparks. En pocas palabras una banda sonora que logra enganchar gracias a una combinación ecléctica, a la presencia de varios nombres de peso, y a la lograda inclusión de las bandas ficticias que, sin ser sus canciones una maravilla, lo ponen a uno en sintonia con respecto a la historia de la película.

En definitiva una buena película, que muy probablemente gane con el tiempo. La propuesta de ‘Scott Pilgrim contra el mundo’ es arriesgada y por eso vale. Personalmente me quedo con el sano humor con el que el director se enfrenta a todas las posibilidades del relato, y que en cierto momento parecen infinitas.

Scott Pilgrim vs. the World: Black Sheep 
 

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